En el año 1595, la Santa Inquisición ejerce una gran influencia sobre la España de ese siglo. En un pueblo español vive el molinero Diego, irresistible para las jóvenes del lugar, que le asedian constantemente. Mientras, al pueblo llega un fraile que se dirige de peregrinación a Santiago, y que es confundido con un hombre enviado por la Inquisición.