A finales del s. XIX, Joseph Ferdinand Cheval es un cartero que viaja cada día por la región de Drôme, de pueblo en pueblo. En uno de estos viajes, conoce a la mujer de su vida, Philomena. De esta unión nacerá Alice. Para esta niña que Joseph ama por encima de todo, se lanza a una aventura loca: construirle con sus propias manos un increíble palacio. Sin desistir nunca, este hombre ordinario no abandonará nunca y consagrará 33 años para construir una obra extraordinaria.